No puedo dejar de dar gracias a Dios por mi suerte. Los últimos años han sido, como todo, altibajos en los que la única constante es que cada mal rato ha estado acompañado de un detalle de luz: mi familia, mis amigos y ustedes, que tienen a bien tomarse la molestia de leer para mentar madres o dejar una palabra de apoyo... En fin, aunque quisiera quejarme, no podría.
Regresé hace un momento del Hospital de especialidades veterinarias de la UNAM sin buenas noticias. Desde el martes pasado mi perro estaba enfermo y finalmente hoy se decidió pensar un poco más en él para dejarlo descansar.
Debo decir que fue una lucha valiente, tanto suya como nuestra. Tratamos todo lo posible y al final, tuvo en contra factores que van más allá de lo que los médicos o nosotros pudimos hacer. En este momento debe estar ya descansando.
¿Dónde está la suerte?
Encontramos el Hospital de especialidadesd veterinarias. Es un lugar donde trabajan (mucho) médicos veterinarios y estudiantes de prácticas en favor de perros y gatos enfermos o lastimados. Ahí, los doctores nos explicaron a detalle todos los procedimientos que se llevaron a cabo con absoluta transparencia, paciencia y comprensión. Y por comprensión me refiero a que tomaron con absoluta seriedad nuestra preocupación y dolor, cosa que no sucedió en la veterinaria donde lo llevamos por primera vez, donde las enfermedades convierten a las mascotas en sacos infinitos de dinero.
El 'Réquiem divino que llegó del cielo' sucedió cuando, luego de firmar la decisión de la eutanasia, las paredes de la silenciosa sala de espera se llenaron de la música que comenzó a tocar uno de los residentes de guardia que, sin notar que había alguien más, saturó el ambiente de notas de guitarra dulce clásica. La música llenó el lugar. Me consuela pensar que lo último que escuchó Romeo fueron las notas que lo acompañaron para alcanzar su último sueño. Eso es suerte. Pienso que, en lugar del ruido sórdido de un hospital de urgencias para mascotas donde hay pasos, aullidos, gritos y timbres de teléfono, le llegó la hora con la dulzura sobria de una música que se quedó marcada en mi memoria junto con su recuerdo.
Sé, y vaya que sé, cuán vacío puede parecer a tantas personas depositar sentimientos tan profundos en un perro estando las cosas como están pero, por que lo sé, no he pedido más que respeto a quienes tiran una mala mueca cuando ven que estoy triste o preocupado por mi amigo. Ha sido dificil poner los sentimientos en su lugar sólo porque es una mascota pero está claro. Aún así, con todo derecho celebro este innolvidable último momento y todos los buenos que nos dimos.
Y sí, como todo, la vida; el trabajo; los amigos; las deudas; las noticias y todo, todo lo que nos rodea, sigue. Sigamos, pues.
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8 comentarios:
Se lo que se siente perder a una mascota que mas bien es un ser querido, desafortunadamente 'Tommy' no tuvo la suerte que Romeo, mi bebe seguramente lo ultimo que escucho fue su propio llanto, inmenso dolor y mucha soledad,la unica veterinaria que estaba abierta a las horas en las que nos sucedio ese desafortunado episodio solo la suturó, dopo un poco y la dejo en 'observación' por una noche y como era de esperarse no sobrevivio fue muy dificil para todos, le lloramos mucho, aun recuerdo como mi papá lloraba mientras sostenia a mi bebe en sus brazos ya muerta yo nisiquiera pude despedirme de ella, era la bebe de la casa hasta la atendian mejor que a mi jaja.
A dos años de su muerte es fecha en que la recordamos todos los dias, tal vez nunca la voy a superar, ya tenemos una nueva chihuahua pero solo nos hace recordar mas a Tommy,es bien dificil este tipo de perdidas aunque muchos digan 'haaay es solo un perro' la verdad es que no es asi.
Te mando un gran abrazo Jerry y muchos besos.
QEPD Romeo
Master Jerry, comparto el dolor de la partida de un amigo tan grande y fiel, como lo puede ser un canino. Yo sé bien lo extraño que le es a ciertas personas el que uno deposite, como usted lo ha dicho y hecho, sentimientos en un pequeño paquete peludo que antes que cualquier otra persona en casa, nos recibe con la más pura de las alegrías. así, simple, sencillo... una lengua de fuera, una cola moviéndose y saltitos y ladridos colados que hacen del fenómeno si bien no una sonrisa de que el pantalón quede hecho un asco, sí hacen de la llegad a casa, eso mismo.
No quiero alargar ésto. Sencillamente quiero que usted mi estimado Master Jerry se sienta acompañado en un dolor que para muchos puede ser absurdo, exagerado y lo que manden... dichosa la manera en que Romeo terminó su paso por aquí, nice thing.
Saludos
Sr. Gerardo: ánimo. Qué buena suerte para él y qué buena suerte para Ud. el saber que tomó una decisión así con entereza y música.
Atte: Juan Ramón Velázquez Mora.
Que te puedo decir...
Creo que faltan las palabras...
Que puedo decir que no te hayan dicho anteriormente... estoy seguro que tu perro tuvo una vida plena, divertida y tranquila... una puerta se le cerro, pero estoy seguro que encontró muchas ventanas abiertas en el lugar al que se dirigió...
Esperemos que se encuentre en un lugar donde no se le regañe por oler todo, por hacer sus necesidades en cualquier lado, donde alguien lo acaricie a cada momento y a su vez este dispuesto a arrojarle un hueso o una vara cada vez que Romeo quiera.
Mucha gente no entiende como es posible que se deposite tanta atención ó amor en una "simple" mascota. Un ser que a ojos de los demás es solo una carga, que quita tiempo, que ensucia la casa, etc...
Y es en la simplesa de su existencia, de su comunicación y su básico consuelo de sólo estar ahí cuando necesitamos una sonrisa, una pequeña compañia que con dedicarnos y pedirnos la atención que aveces no tenemos de nuestra propia familia, llena ese hueco que nos hace sentir un poco más felices.
Al menos Romeo tuvo una vida féliz y una despedida tranquila Jerry, no cualquiera tiene eso.
Saludos y un abrazo.
Jerry, animo, la vida así es, y se lo doloroso que es perder a un amigo, por que eso es lo que son las mascotas para algunas personas (como en mi caso) pero creo que hay que pensar que su vida no solo fue sus últimos días, si no los momentos felices que paso a su lado y los que te hizo pasar con su presencia, yo siempre he dicho que el día que yo muera, iré al cielo de los perros, por que los humanos somos mas bestias que cualquier animal, y los perros son mas "derechos" que muchas personas, a lo largo de mi vida he perdido muchos amigos caninos, y es triste, pero a la vez es hermoso que se pueda querer y ser querido por una mascota.
Espero que tu dolor pase pronto, Romeo ahora esta bien, piensa en eso, de seguro que el prefería verte contento.
Y hay muchos MVZ que tenemos corazón y no solo son objetos de dinero, es una lástima que algunos "colegas" ensucien la imagen de los demás veterinarios.
Y como dices... la vida sigue... así que SE FELIZ!
ATT: tu Padawan Eduardo (Mr. Valemadre)
Gracias a todos, de corazón. Sigamos, pues.
= D
Yo en lo personal creo que las personas que no le dan el respeto y cariño que merecen sus mascotas tienen problemas, cuando una mascota mía se va a seguir el inevitable camino de la vida, yo me destrozo, cuando Mau se fue llore durante una semana, cuando Oreo y Wyatt fueron robados me deprimí horriblemente, inclusive cuando el Señor Conejo se escapo al monte me deprimí, era una liebre así que probablemente era lo mejor para ella.
En estos momentos en que se cree que lo que sientes es una exageración, te diré que no podrías estar más equivoco, una mascota no es solo eso, se vuelve un oído cuando nadie quiere escucharte, un beso cuando te sientes solo y un pañuelo cuando no hay a quien llamar.
Hace unas semanas Mafalda enfermo y todas en la casa nos desvivimos por cuidarla, no hacíamos ruido y la tratamos con mucho cuidado, inclusive mi madre quien no es su mayor fan.
Date tu tiempo para sentirte triste Gérard, para mostrarle que realmente era una parte importante de tu día a día y cuando quieras superarlo, hazlo, pero no porque creas que estas haciendo mucho drama.
Estamos contigo Jerry.
Besos.
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